A través de MarketGreen, Banco Falabella nos planteó el desafío de revalorizar tarjetas bancarias en desuso. La principal barrera con la que nos enfrentamos fue el trabajo con material plástico PVC ya que este al ser manipulado sobre los 180º C libera gases altamente tóxicos perjudiciales para la salud.

 

En alianza con el FabLab UChile experimentamos a nivel semi industrial con máquinas que nos permiten probar diferentes procesos físicos para transformar el residuo PVC en materia reutilizable. 

​

De esta forma probamos procesos físicos de extrusión, inyección en molde y laminación que nos permitieron corroborar diferentes hipótesis respecto al comportamiento del material. 

 

Pudimos concluir que el proceso de laminación era el más eficiente en el uso de energía, escalamiento, liberación de gases y resultados materiales. 

 

Llegamos a una propuesta material basada en láminas que permiten revalorizar el desecho de PVC fabricando recubrimientos y palmetas para ser utilizadas en las sucursales de Banco Falabella.